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EL CIRCULO POLAR Y EL SOL DE MEDIA NOCHE - THE ARTIC CIRCLE AND THE MIDNIGHT SUN.

  • alaskatierrafuego
  • 11 jul 2016
  • 5 Min. de lectura

Aunque la idea era llegar a Fairbanks y de ahí conducir continente abajo, ya que pensábamos que no había mas carretera al Norte,hemos cambiado de planes y así que después de despedirnos de Alex y Vane que van hacia el sur nos ponemos en dirección al Círculo Polar Ártico por una pista llamada carretera Dalton y apodada como “ la montaña rusa “.

Esta Ruta de 797 km fue construida para dar servicio a la estación de crudo más grande de Estados Unidos y a lo que llaman la pipeline, una tubería de 1,30m de diámetro 1400 km longitud que transporta el oro negro hasta Anchorage donde puede ser embarcado o refinado. Nos han recomendado llevar dos ruedas de repuesto, comida y agua suficiente por si hay que pasar mas días de los previstos hasta que pasé alguien, que posiblemente sea algún camión gigante de los que trabajan en la compañía petrolífera y que se creen los dueños de la pista, que tengamos cuidado con los osos que están muy curiosos por ahí arriba, y si llevamos una emisora de radio mejor porque no hay cobertura , ni ningún tipo de servicio, además llevar gasolina en latas porque solo hay dos gasolineras en el recorrido, en fin, todos los ingredientes para echarse para atrás, o todos para un buena aventura porque - ¿cuando vamos a tener la oportunidad de ir al circulo polar ?.

El día antes, empezamos los preparativos que nos obligan a desmontar la casita de la camioneta con el fin de poder sacar la rueda de repuesto de la parte de abajo de la camioneta y que no hay manera de sacarla, gracias a Alyska neumáticos que sin cobrarnos nada nos han ayudado a rescatar esa rueda que será la única que llevamos porque comprar otra vale 300 $. Desmontar la casita tendrá ciertos efectos secundarios que la cinta americana ayudará a remendar, pero en cualquier caso había que hacerlo antes o después.

La sola sensación de entrar en el circulo polar es grande pero el paisaje que lo acompaña es mas grande todavía, pasamos horas en nuestros campamentos observando el sol hipnotizados viéndolo girar alrededor nuestro sin esconderse.

Hacemos una parada en el lago Grayling donde conocemos a tres trabajadores de de la pipeline que nos dan detalles sobre esta gigantesca tubería, la chica se queda entusiasmada con nuestro viaje y nos pide grabarnos un vídeo y hacerse una foto con nosotros, ella también tiene el mismo sueño de recorrer el continente americano, también para un chico canadiense en motocicleta con el que kilómetros adelante tendremos un nuevo encuentro para prestarle gasolina ya que se ha quedado tirado, nos da mil gracias y nos dice que también va hacia la Patagonia, - “ Pues igual nos vemos en el camino”.

La siguiente parada es Coldfoot, una estación de servicio con un bar donde conocemos a Pierre un chico de la Bretaña francesa que acaba de empezar su aventura pero con un par, piensa cruzarse América en bicicleta. ¡Admirable!, esperamos volver a encontrarlo en el camino.

A pocos kilómetros se encuentra Wiseman, el único pueblo en estos 800 km de trayecto, con una población de catorce personas en realidad son cinco casas y unas cabañas para turistas, conocemos a Jack que nos habla un poco de la vida aquí y las condiciones climáticas de esta zona remota. Seguimos conduciendo absortos en este paisaje de montaña que poco a poco se va convirtiendo en tundra vemos el arbol que se encuentra más al norte del continente americano, de repente una tormenta con granizo nos pone en alerta y nos obliga a parar porque no se ve nada, estamos a punto de bajar un puerto de montaña y el camino está un tanto resbaladizo.

Después de unos minutos, un arco-iris multicolor aparece delante de nuestros ojos.... De nuevo la magia de la naturaleza nos ofrece un bonito regalo.

Pero en toda historia hay un lado oscuro y aquí son los miles de mosquitos al llegar a nuestro destino final de esta aventura el lago Galbraith. A pesar de esto, decidimos quedarnos un par de días en este precioso y solitario lugar explorando la tundra, andando encima de aufeis( ríos congelados), contemplando uno de sus glaciales y observando a las decenas de marmotas, porque osos no se ven muchos. Hemos pasado cinco días en esta naturaleza solitaria y llena de luz y de sol de media noche volvemos a la civilización sanos y salvos con una experiencia inolvidable.

Nos despedirnos de este vasto e inmenso lugar donde las lejanas montañas forman la linea del horizonte, donde nuestros ojos quedan cautivados con las tonalidades marrones y verdes de este lugar que sera el punto mas al norte de nuestro viaje, vamos en dirección sur, queda un largo camino por recorrer.

The mere feeling of entering the Artic Circle is big but accompanied with this landscape is even bigger.

We spend hours watching the sun our campsites hypnotized watching the sun spin around us without hiding for 24 hours.

We stop at the Grayling Lake where we meet three workers of the pipeline that gave us details on of this pipeline giant, the girl is very excited about our trip and ask us to record a video and make a picture with us, she has the same dream of driving all the American continent, also Canadian guy in a motorcycle stops we will meet him again some kilometers ahead to lend him gas as his running out of it, - not the best place, he gives us many thanks and tells us that he also goes to the Patagonia, Maybe we will meet on the way.

The next stop is Coldfoot, a service station with a bar where we meet Pierre a guy from the French Bretagne he just started the adventure of crossing America but with a lot of courage he will do it by bike. ¡Admirable!, - we hope we meet along the way.

A few kilometers away is located Wiseman, the only village of fourteen people population in these 800 km there are actually five houses and few huts for tourists, here we meet Jack who tells us a bit of the life here and the climatic conditions of this remote area.

Absorbed in this landscape of Mountains that little by little became tundra and we see the last tree, sudeenly a hail storm puts us on alert and forces us to stop because we are on the way down on a mountain´s port and the ground is quite sleeper and there is not much visibility. After a few minutes the multicolored rainbow appears in front of our eyes. ... again the magic of nature offers us a nice gift.

But throughout every history there is a dark side and here are the thousands of mosquitoes when we reach our final destination of this adventure at Galbraith Lake.

Despite this, we decided to stay a couple of days in this beautiful and lonely place exploring the tundra, walking up aufeis (frozen rivers), staring at one of its glaciers and watching dozens of marmots around, because there are not much bears up here.

We have spent five days in this lonely and full of light nature, with the magic midnight sun, we are back safe and sound to civilization with an unforgettable experience.

We say goodbye to this vast nature where the distant mountains form the horizon line, where our eyes are captivated with the brown and green shades of this place that will be the northernmost point of our trip, we go south, there is still a long way to drive.


 
 
 

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